¿Cuándo acudir a un pedagog@?

Es cierto que con el inicio de curso comienzan a llegar a los gabinetes niños y niñas en busca de ayuda por parte de un pedagogo o pedagoga, pero muchas veces llegan buscando otro servicio y no saben que para su necesidad es el perfil de un pedagog@ el profesional que necesitan.

Hoy vamos a hablar sobre cuándo una familia debe acudir a un profesional de la pedagogía:

Aunque muchas derivaciones nos llegan por alertas a nivel escolar, las familias también pueden denotar alguno de los siguientes signos de alerta que podrían hacerles acudir a buscar a un especialista de la pedagogía, vamos a ver algunos de los signos que tenemos que tener en cuenta tanto desde los centros escolares como desde el entorno familiar:

  • Cuando un peque llega al primer curso de educación primaria y aún no reconoce las letras (ni en mayúsculas ni con letra ligada). Aunque si es cierto que la enseñanza obligatoria comienza en este curso, si el peque ha estado escolarizado en la etapa de infantil y aun así no reconoce las letras en ninguna de las distintas tipografías con las que trabajan deberá ser considerado como signo de alerta.
  • Otro signo de alerta podría ser un niño o niña que con siete u ocho años y una lectoescritura ya fluida confunda palabras al leer, o bien sea porque se salte letras o porque no lea de forma adecuada la palabra.
  • También debemos observar en niños y niñas que ya escriben con soltura posibles fallos en su escritura de inversión de letras, omisión de las mismas, fallos que puedan ser debidos a dificultades fonológicas, etc.
  • Si vemos que aún con una adaptación de grupo, no hubiera una buena relación e interacción social con sus iguales, dando lugar a un posible aislamiento en el peque con respecto a sus compañeros deberíamos plantearnos acudir en busca de un profesional de la pedagogía.
  • Tenemos que tener en cuenta a aquellos peques que parecen no comprender las órdenes que se les dan, que se ven perdidos y/o desorientados y se limiten a imitar a sus compañeros sin saber porqué hacen lo que hacen.
  • Alumnos inquietos, que aun estando sentados no paran de moverse, son impulsivos a la hora de actuar y de hablar, hacen saltos en sus conversaciones y se distraen con facilidad, haciendo que pierdan incluso el hilo de la clase.

Estos son solo algunos signos de alerta que debemos tener en cuenta en el primer mes o primeras semanas de adaptación, con esto no quiero decir que si existiera alguno de estos signos estuviéramos hablando de un problema existente, simplemente son signos que nos harían acudir a un profesional para poder ayudar a los peques y ver si existiera un problema per se o hubiera alguna explicación que pudiera estar causando dichos signos de alerta.

Como siempre digo, cada caso es un mundo y hay que conocer todos y cada uno de los detalles que rodeen a los peques para poder dar la mejor respuesta posible.

Os deseo un muy buen comienzo de clases y os invito a dejarme vuestras impresiones por aquí.

Un saludo y feliz lunes.

Vicky, una pedagoga en apuros.